COLOMBIA YA ELIGIÓ UNA 'VICE' DE NUESTRA REGIÓN

La Caleña Marelen Castillo y Francia Márquez de Suárez, Cauca, son dos extraordinarias mujeres, dignas representantes de nuestra región, que se destacan por su liderazgo en sus respectivos campos de trabajo.

Mayo 31 del 2022

Colombia ya eligió como vicepresidente a una mujer de nuestra región: una caleña y otra de Suarez, al norte del Cauca. Conozcamos el perfil de estas dos extraordinarias mujeres.

Marelen Castillo: cercana a la Iglesia Católica

Marelen Castillo, la fórmula vicepresidencial de Rodolfo Hernández, nació el 30 de agosto de 1968 en Cali. Es una docente, muy católica y entregada a su familia. Su nombre se puso a sonar en el país a principios de marzo, cuando aceptó convertirse en vicepresidente si el exalcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández, es elegido.

Castillo es la mayor de cinco hermanas y se crió en el barrio La Base. Es hija de una modista de Buenaventura y un vallecaucano pensionado como funcionario público. Se graduó del Colegio Nuestra Señora del Pilar de Cali. Mientras estudiaba su primera carrera profesional, licenciatura en biología y química en la Universidad Santiago de Cali, comenzó a dictar clases en su antiguo colegio. Terminó su pregrado en 1992 y durante once años fue profesora en el Colegio Mayor Santiago de Cali.

Al mismo tiempo, estudió ingeniería industrial en la Universidad Autónoma de Occidente y se graduó en 2001. Desde ese año y hasta 2007 trabajó en la Fundación Universitaria Católica Lumen Gentium, como docente y también como decana de ingenierías, de ciencias empresariales, vicerrectora académica y rectora encargada.

En 2007 terminó su maestría en administración a distancia en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey y un año después, se mudó a Bogotá. Llegó a la capital tras vincularse con la Corporación Universitaria Minuto de Dios, Uniminuto, institución católica fundada por el padre Rafael García-Herreros en los años noventa.

Su primer cargo fue como vicerrectora general académica. Desde allí, diseñó planes de acción para fortalecer la educación virtual, área en la que también tiene experiencia como investigadora.

En 2011 asumió la rectoría de Uniminuto Virtual y a Distancia. Cinco años después, volvió a la Vicerrectoría Académica de la Universidad y en 2017 terminó un doctorado en educación de Nova Southeastern University, en Florida, Estados Unidos.

Desde febrero de 2021 pasó a ser directora de Iniciativas Estratégicas de la Uniminuto, cargo que desempeñaba cuando fue invitada por Rodolfo Hernández para ser su fórmula vicepresidencial. Su hoja de vida llegó a la campaña del exalcalde de Bucaramanga por recomendación del exrector de la Uniminuto Alonso Ortíz Serrano, primo de un amigo personal del candidato y amigo de Castillo. Su vinculación se dió tras la fallida fórmula con la periodista Paola Ochoa y de intentar infructuosamente con al menos siete personas más, entre empresarios, periodistas y exfuncionarios.

Marelen Castillo por su formación y por su carrera profesional se percibe cercana a la Iglesia Católica, por lo que se constituye en un "peso pesado" en la arena electoral.

Francia Márquez: representando a la "nueva izquierda"

Ahora recordemos el perfil de otra extraordinaria mujer: Francia Elena Márquez Mina, fórmula vicepresidencial de Gustavo Petro. Nacida en Suárez, Cauca, el 1 de diciembre de 1981, es una reconocida líder que encarna lo que genéricamente se ha denominado "la nueva izquierda" porque reivindica la defensa del medio ambiente, los derechos humanos y el feminismo.

Márquez fue representante legal del Consejo Comunitario del corregimiento de "La Toma" de Suárez, al norte del departamento del Cauca donde se opuso a la explotación y entrega indiscriminada de títulos mineros debido al impacto negativo de estas actividades, como el deterioro del medio ambiente y el desplazamiento forzado de comunidades. Esto le valió amenazas y atentados contra su vida, pero también el reconocimiento internacional como defensora de derechos humanos y del medio ambiente.

Ha recibido varias distinciones por sus actividades sociales y ambientales, entre ellas los premios Goldman de medio ambiente y Joan Alsina de derechos humanos.​ Fue presidenta del Consejo Nacional de Paz y Convivencia en el año 2020 ​donde se ocupó del seguimiento al cumplimiento de los acuerdos de paz.

La madre de Francia Márquez es partera, agricultora y minera. Su padre, agrominero y obrero. A la edad de 16 años tuvo el primero de sus dos hijos que crio cómo madre soltera. Durante su adolescencia trabajó como minera de oro artesanal en su municipio y como empleada doméstica en la ciudad de Cali.

Márquez se graduó de técnico agropecuaria en el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA). En 2020 obtuvo un título en Derecho de la Universidad Santiago de Cali y en el 2021 inició una especialización en escrituras creativas en la Universidad ICESI.

"Cabeza a cabeza"

Va a ser muy interesante el debate político en esta nueva etapa de la contienda electoral. Con su carisma y propuestas, Márquez ha sido la única vicepresidente que se ganó a pulso su posición como fórmula de un candidato presidencial. Los demás tuvieron la fortuna de ser seleccionados "a dedo". Esa dificultad la ha llevado a ser una reconocida líder de talla nacional, que brilla con luz propia, y que delinea la manera como podría ejecutar su cargo vicepresidencial.

En contraparte, a Marelen Castillo le falta más reconocimiento, algo en lo que tendrá que trabajar en las tres semanas que faltan.

Ambas mujeres son luchadoras y triunfadoras en los diferentes escenarios que les ha colocado la vida. Márquez, una mujer de campo, usa su liderazgo de impacto mundial para salvar los ecosistemas colombianos del que depende toda la humanidad, mientras Castillo, hija de la urbe caleña, enfoca su exitosa carrera académica en mejorar la educación colombiana.

Pero, sus historias de vida las llevan a caminos opuestos: Mientras Marelen Castillo se forma con todas las posibilidades de una familia de clase media urbana, a Francia Márquez le toca asumir no sólo las limitaciones del campo colombiano sino una maternidad a temprana edad que la obliga a trabajar.

Ambas buscan "el cambio" pero desde perspectivas diferentes. Castillo buscaría transformaciones lentas pero profundas a través de la educación mientras Márquez enarbola banderas de acción inmediata ante las injusticias que hoy se cometen hacia el medio ambiente o hacia la mujer, que no dan tregua.

¿Hay más diferencias? Ello sólo se conocerá cuando en medio del debate tanto Rodolfo Hernández como Marelen Castillo precisen sus propuestas programáticas.