"HAY QUE AVANZAR CUANTO ANTES EN LA NUEVA MEGAOBRA DEL CANAL DEL DIQUE": VICEPRESIDENTE MARTA LUCÍA RAMÍREZ

A pocos meses de realizar la licitación para su construcción, y después de seis años de haberse diseñado, los empresarios de la industria fluvial cayeron en cuenta que la obra afectará la navegabilidad en el Dique, y por ende la rentabilidad del negocio.

Marzo 9 del 2021

La Vicepresidente Marta Lucía Ramírez celebró el respaldo del Comité Técnico de Seguimiento al proyecto del Canal del Dique y les salió el paso a los cuestionamientos tardíos de los empresarios de transporte fluvial. “Esta megaobra nos conmina a todos a movernos para el mismo lado. No es la hora de que vengamos a escuchar críticas a un proyecto de este tamaño. Desde el año 2015 están los diseños; todas las personas y empresas interesadas tuvieron oportunidad durante cerca de seis años para opinar, para objetar, hubo distintos espacios. Aquí tenemos solamente un camino: avanzar para lograr la construcción de este Canal del Dique cuanto antes”, señaló.

Sostuvo que esta megaobra, que saldrá a licitación este semestre, no tiene marcha atrás. “Queremos que las personas que habitan en esos 20 municipios ribereños al Río Magdalena, puedan tener la certeza de que la amenaza de que el río se vuelva a desbordar, a llevarse sus viviendas, sus cultivos, arrasar con la pesca, con sus economías, sea algo que quede, para siempre, en un lejano recuerdo”, puntualizó.

Añadió que los habitantes de Cartagena tendrán también la certeza de que el turismo va a crecer. “La sedimentación se va a poder frenar y el miedo de que el agua que consumen los cartageneros algún día salga salada, dejará de existir. El objetivo es regular las aguas con el ciclo de lluvia del país, y esto permitirá asegurar la navegabilidad”, dijo.

La alta funcionaria recordó que el andamiaje del proyecto ya está listo, así como la financiación. “Nuestro Gobierno se concentró en identificar fuentes de pago que permitieran la construcción de este proyecto. Yo misma me dediqué a buscar que pudiéramos sumar distintas fuentes de pago, porque el Gobierno Nacional no podía hacerlo solo. Les solicité a los gobernadores de Atlántico, Sucre y Bolívar, que pudieran aportar parte de las regalías. También le pedí a Ecopetrol, que hiciera parte de los aportes, así como los privados, por cuenta de las compensaciones portuarias. De tal manera que, con la sumatoria de todos, pero especialmente con la sumatoria de recursos del presupuesto general de la Nación, que el Presidente Iván Duque dio la instrucción de que se incluyeran, hoy, la estructuración financiera del Canal del Dique, por fin, es una realidad”, expresó.

El Problema del canal del Dique

The Nature Conservancy (TNC) en el año 2011 hizo el siguiente video titulado "El Canal del Dique: una bomba de tiempo" donde expone el gran problema de dicho canal, al norte de Colombia. La obra, construida originariamente por esclavos de los españoles, tuvo a lo largo de la historia una serie de modificaciones, siendo que, hacia el año 1981 lo "enderezaron", quitándole gran parte de las curvaturas que tenía, con el fin de hacerlo más eficiente para la exportación de petróleo.

El resultado de dicha intervención ha sido catastrófica para el medio ambiente, generando un enorme caudal en el canal, contaminación, inundaciones y destrucción del ecosistema de la bahía de Cartagena hasta el punto que está matando el coral de las islas del Rosario.

La propuesta diseñada

En el año 2017 el Fondo de Adaptación ya presentaba al público el diseño de lo que podría solucionar el problema. Las obras específicamente contemplan la construcción de dos sistemas de esclusas en las poblaciones de Calamar y Puerto Badel, compuertas en Calamar y obras de interconexión entre las ciénagas de las áreas de influencia del canal, controlando el tránsito de sedimentos y la intrusión salina.

Las criticas tardías

Sin embargo, ahora en el 2021 y a pocos meses de hacer la licitación para construir la obra, los empresarios de la industria fluvial, cayeron en cuenta que los diseños como están pensados afectarían la navegabilidad en el Dique, y por ende su rentabilidad.

“El diseño que están usando para las esclusas es de un convoy de un remolcador y seis barcazas en conformación 2x3, es decir, hablamos de un convoy de 32 metros de ancho con 220 metros de eslora, pero en la práctica, la mayor parte de los convoyes que transitan por el canal del Dique y el río Magdalena hasta Barrancabermeja operan con ocho, diez, y hasta catorce barcazas. Lo que va a ocurrir es que cuando lleguemos a esas esclusas, que son dos, esos convoyes tienen que dividirse. Si hacemos esto se multiplica el tiempo de tráfico”, dijo Pedro Muñoz, gerente de la Naviera Fluvial Colombiana.

Por este motivo, Muñoz y otros empresarios del sector, elevaron una solicitud a la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) a que reevalúe los estudios hechos por la compañía holandesa Royal HaskoningDHV y amplíe el tamaño de las esclusas.

“Lo que estamos pidiendo es que alarguen las paredes de la cámara para que las embarcaciones puedan pasar de una sola vez”, dijo Muñoz, quien aseguró que el estudio no tuvo en cuenta esta observación cuando apenas se estaban realizando los diseños.

Sin embargo, según lo ha expuesto la vicepresidente Marta Lucía Ramírez, desde el 2015 ya los interesados conocían los diseños. Y plantear ahora cambiarlos significa más desembolsos, más tiempo para realizar la obra, y por ende, más daño para los afectados y para el medio ambiente.