ALTAS FUNCIONARIAS SE PRONUNCIAN SOBRE EL ABORTO EN SEIS MESES DE EMBARAZO

Ambas funcionarias coincidieron en la necesidad de mejorar la educación sexual y velar también por los derechos del feto a los seis meses.

Febrero 24 del 2022

Tanto la vicepresidente-canciller de Colombia, Marta Lucía Ramírez, como la presidente de la Asamblea Departamental del Valle del Cauca, Luzdey Martínez Martínez, se sumaron a las voces de rechazo ante la sentencia de la despenalización del aborto hasta la semana 24 de gestación.

La vicepresidente-canciller Ramírez afirmó: "Soy respetuosa de las decisiones de la justicia colombiana, que deben ser acatadas como corresponde. Sin embargo, considero que, más allá de lo penal, este fallo encarna un asunto ético y moral de gran preocupación: más que despenalizar el aborto, legitima la muerte de un ser humano formado, con una gestación de 24 semanas, que está en condiciones de sufrir dolor. Sabemos que muchos bebés nacen prematuros a los seis meses, y después de luchar por sobrevivir, logran tener una vida plena, saludable y feliz. Es esa la edad en la cual muchos de ellos serán abortados ahora", afirmó la alta funcionaria.

"Cuando hablamos del derecho de las mujeres, debemos –sobre todo– hablar de su derecho a sostener relaciones sexuales consentidas y seguras. Como Estado y como sociedad, nos convoca la responsabilidad de garantizar métodos anticonceptivos asequibles, así como condenar y castigar férreamente cualquier tipo de agresión sexual en su contra. ¡La presión de la sociedad no puede seguir recayendo sobre los hombros de las mujeres!", señaló Ramírez.

También llamó la atención sobre la responsabilidad en la aplicación del fallo y la necesidad que el Congreso regule el tema.

"Hago un llamado a la responsabilidad en la aplicación de este fallo. Es apremiante una regulación del Congreso de la República que permita la razonabilidad y racionalidad de la práctica del aborto luego de esta decisión. Ya había tres excepciones sobre las cuales el Congreso nunca quiso legislar, dejando en la práctica a las mujeres expuestas a condiciones sanitarias precarias que ponen en riesgo su vida; esto no puede volver a pasar".

"Sería terrible que Colombia se llene de sitios de aborto, por cuenta de un fallo más progresista que la mayoría de países del mundo. Esta es una decisión crucial para la sociedad colombiana que ha debido tener una representación democrática a través del Congreso o de un referendo" dejo la vicepresidente y canciller de Colombia.

Finalmente recordó que la Convención Americana sobre Derechos Humanos protege la vida desde la concepción. "Tal como lo establece el artículo 4 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, se debe proteger la vida desde la concepción. Es bajo ese parámetro como debemos leer este fallo: promover y proteger la vida de la mujer y del ser humano que está por nacer, con una política integral. Debe haber mejor educación sexual y reproductiva para hombres y mujeres, así como acceso a anticonceptivos que permitan prevenir efectivamente los embarazos no deseados"., puntualizó.

Por su parte, la presidente de la Asamblea Departamental del Valle del Cauca, Luzdey Martínez Martínez, instó a la Corte Constitucional a revisar dicha decisión “que vulnera el derecho a la vida de seres humanos, que, con seis meses en el vientre de una madre, ya son unos fetos totalmente sintientes”.

“Considero, como mujer, madre y abuela, que es desafortunada esa determinación, incluso a esa altura de un embarazo, se está poniendo en altísimo riesgo a la propia madre que opte por la interrupción voluntaria”, manifestó la diputada, recordando que, en su momento causales “como el riesgo para la mujer, la malformación del feto o el acceso carnal violento, fueron entendidos por la sociedad, pero en un embarazo tan avanzado no es comprensible”.

Por último, dijo que es necesario desde todas las instancias hacer un llamado a la comunidad, especialmente a los jóvenes, sobre la maternidad y paternidad responsables, y educar acerca de los mecanismos de anticoncepción, porque “no podemos hacer del aborto una práctica normal, del diario vivir”.